En función de la época del año, las aguas cristalinas de la isla se van poco a poco copando de bañistas y de vida. Son muchas las playas y calas más conocidas, algunas incluso deben cerrar el acceso en temporada alta- otras son bellas y además populares por su ambiente festivo. Pero…¿hay rincones en la isla donde darse un baño y aprovechar el roce disfrutando de la tranquilidad y de la paz de Ibiza? La respuesta es si, te aconsejamos 5 calas románticas para ir en pareja:

ES PORTIXOL

Una calita aislada de pescadores donde la naturaleza, sus aguas cristalinas y tranquilidad te dejarán sorprendido. Cuenta con un acceso complicado, la entrada esta precedida por un acantilado lo que hace que esta playa no este masificada. Una playa casi perfecta aunque cuenta con algunos inconvenientes, como la imposibilidad de tomarte una caña helada en un chiringuito.

Calas románticas para ir en pareja

ES CANARET

Es una cala paradisíaca y perdida. Esta pequeña cala era privada, solo accesible a través de una casa situada en su orilla. Hace poco, se habilitó un camino para que todos pudiéramos disfrutar de este rincón. Se trata de una cala de aguas turquesas, con fondos arenosos y rocosos, ideal para practicar snorkel. Nuestro consejo es que acudas pronto si vas en fin de semana.

Calas románticas para ir en pareja

ES CALONET

Es Calonet es una pequeña y coqueta cala situada justo al lado de Cala Tarida. La orilla está rodeada completamente de casetas de pescadores. Ideal para ver la puesta de sol con el islote de S’espartar de fondo y dejarse cautivar por la naturaleza ibicenca.

Calas románticas para ir en pareja

ES CODOLAR

La Playa de Es Codolar, a pesar de no ser una pequeña cala, es muy poco frecuentada para el baño por sus grandes rocas (codols) y su falta de comodidad. Sin embargo, es una de las pocas playas en Ibiza en las que podrás nadar prácticamente solo, aunque sea agosto.

Calas románticas para ir en pareja

PUNTA GALERA

Punta Galera es otro de los rincones donde se respira tranquilidad en la isla. Situadas cerca de Cala Salada y San Antonio, es el lugar por excelencia para los nudistas. Sus rocas, que parecen imitar un hojaldre de pan; quizás no se trata del lugar más cómodo donde echarse sobre la toalla, pero sí desde luego donde se respira una tranquilidad que todos los bañistas la respetan a raja tabla.

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